Chef Jorge Jaramillo

Desde muy joven supe que mi pasión por la cocina era más que un simple interés; era una vocación que me llevaría a vivir experiencias inolvidables a lo largo de mi vida. Durante más de 16 años, he dedicado mi tiempo y esfuerzo a perfeccionar el arte culinario, trabajando incansablemente como cocinero y pastelero en algunos de los mejores hoteles de la ciudad de Bogotá, como Hilton y Grand Hyatt. En cada uno de estos lugares, tuve el privilegio de aprender de grandes chefs, quienes no solo me enseñaron técnicas culinarias avanzadas, sino que también me transmitieron la importancia de la creatividad y la pasión en cada plato que elaboramos.

Mi trayectoria laboral ha sido una combinación de aprendizaje continuo y dedicación, en la que he podido explorar y dominar una amplia variedad de cocinas y reposterías. Cada día en la cocina ha sido una oportunidad de crecer y experimentar con nuevos sabores y presentaciones, siempre buscando la perfección y la innovación en cada bocado.

Tras años de experiencia en el ámbito hotelero, decidí emprender mi camino como empresario, abriendo una pequeña pastelería donde pude plasmar todo lo aprendido y compartir mis creaciones con la comunidad. Este emprendimiento me permitió ser más creativo, experimentar con sabores autóctonos y presentar mis dulces de una manera única. Sin embargo, el llamado de mis raíces siempre estuvo presente en mi corazón.

Fue así como, tras un tiempo dedicándome a la pastelería, tomé la decisión de regresar al departamento del Quindío, donde mis orígenes me anclaron. Este regreso no solo representó un retorno físico, sino también un reconectar con la esencia de mi tierra, un lugar rico en tradición culinaria, insumos frescos y diversidad de sabores. Mi deseo es explotar el potencial gastronómico de esta región, fusionando lo aprendido a lo largo de los años con los productos locales y las tradiciones que siempre me han definido.

Mi camino como chef se ha convertido en un viaje constante de descubrimiento, donde el amor por la cocina y el compromiso por resaltar lo mejor de mi tierra son los pilares de mi labor diaria. Espero seguir creando experiencias memorables a través de mis platillos, honrando mis aprendizajes y, sobre todo, celebrando la rica herencia gastronómica del Quindío.